jueves, 24 de enero de 2013

Perfil profesional del Técnico Superior en Dietética y Nutrición


Perfil profesional del Técnico Superior en Dietética según el Real Decreto 536/1995, de 7 de abril.

1. Identificar las necesidades nutricionales de la población en general, elaborando dietas adaptadas a los mismos y realizar su seguimiento.

2. Elaborar dietas adaptadas a personas y/o colectivos con patologías específicas, interpretando y siguiendo las prescripciones médico-dietéticas y realizar el seguimiento de las mismas.
3. Determinar la calidad alimentaria e higiénico-sanitaria de los alimentos aplicando técnicas analíticas sencillas, interpretar los resultados analíticos e informar, elaborando y/o proponiendo medidas correctoras.


4. Controlar la conservación, manipulación y transformación de alimentos de consumo humano, detectando los riesgos para la salud y proponiendo medidas correctoras de los mismos.
5. Evaluar la influencia que los hábitos alimentarios y el estado nutricional de las personas tienen sobre la salud/enfermedad, explicando los aspectos preventivos, asistenciales y rehabilitadores.


6. Prevenir los riesgos laborales asociados, tanto personales como de las instalaciones, aplicando medidas de higiene y de protección.
7. Participar en el diseño y aplicar, programas y estrategias de promoción de la salud para promover actitudes y hábitos preventivos e higiénico-sanitarios en la población.



8. Mantener la funcionalidad y mejorar el rendimiento de la unidad/gabinete de trabajo cuidando, de los aspectos organizativos, humanos, materiales y funcionales de la misma.
9. Participar en la puesta a punto de nuevas técnicas, en proyectos de investigación y en programas de formación continuada, así como proponer medidas relacionadas con la eficiencia y la seguridad en el trabajo.


10. Organizar y/o programar el trabajo de la unidad/gabinete, adaptando procedimientos, produciendo información e instrucciones, previendo, asignando o distribuyendo tareas, recursos y materiales.

11. Valorar la interrelación de las personas con los estados de salud/enfermedad y precisar sus aspectos asistenciales, preventivos y rehabilitadores.





miércoles, 16 de enero de 2013

Hablemos del colesterol!


Sabes que es el colesterol? ¿Cuál es el bueno y cuál es el malo? ... ¿Cuáles son los niveles normales? ... Sabes como puedes prevenirlo? ... Y por último, sabes cuáles son sus consecuencias?

Cuántas veces te lo has preguntado? ... Sigue leyendo y encontrarás las respuestas.

El colesterol es una sustancia natural grasa que se encuentra en todas las células de nuestro cuerpo, el cual es imprescindible para el funcionamiento normal del organismo

El cuerpo necesita una determinada cantidad de colesterol para trabajar correctamente, y el hígado es el encargado de producir la mayor parte. El resto, lo introducimos a través de la dieta.

Para ser más exactos, el hígado produce el 75% del colesterol que nuestro cuerpo necesita, y el 25% restante lo deben aportar los alimentos.


Clasificación niveles de colesterol:


Normal
Normal-Alto
Alto
Colesterol total
< 200
200-240
> 240
LDL-colesterol
< 100
100-130
> 130
HDL-colesterol

> 55 mujeres
> 45 hombres
50-55 mujeres
40-45 hombres
< 50 mujeres
< 40 hombres


¿Cuál es cuál?

Siempre hemos oído hablar del colesterol bueno y malo, pero ¿cuál es cuál? No existen dos tipos diferentes de colesterol, de colesterol sólo hay uno.

Lo que hace que sea bueno o malo son las lipoproteínas, que son unas moléculas a las que se adhiere el colesterol para viajar por el torrente sanguíneo. Están formadas por fosfolípidos, colesterol y proteínas, y su composición hace que sean más o menos beneficiosas.

Las clasificamos en 2:

- LDL ("colesterol malo"): son las encargadas de transportar por el torrente sanguíneo el colesterol nuevo desde el hígado hasta las células. Un exceso de éste hace que se acumule en las paredes arteriales provocando lesiones. El 50% de la masa de las lipoproteínas LDL es colesterol.

- HDL ("colesterol bueno"): son las encargadas de recoger el exceso de colesterol y transportarlo de nuevo al hígado para ser almacenado o eliminado. El 50% de la masa de las lipoproteínas HDL son proteínas.



¿Cuáles son las consecuencias de este exceso?

Un exceso del LDL hace que este se acumule en las paredes de las arterias coronarias formando una placa de grasa, conocida como placa de ateroma. A consecuencia de ello los vasos sanguíneos que irrigan el corazón se bloquean, disminuyendo la cantidad de sangre aportada al corazón y la consecuente falta de oxígeno, provocando un infarto de miocardio.

Las placas de ateroma además de las coronarias también pueden obstruir arterias en diferentes partes del cuerpo, como las piernas (enfermedad vascular periférica) y el cerebro (ictus, embolia).

La causa fundamental de estos síndromes es la aterosclerosis, que la podemos definir como una reacción inflamatoria y proliferativa a las lesiones de la pared arterial.


Factores de riesgo de la aterosclerosis:

- Edad y sexo.
- Historia familiar en parientes de primer grado con enfermedad vascular prematura.
- Tabaquismo: La nicotina y otras sustancias del tabaco tienen un efecto tóxico directo sobre la pared de las arterias, provocando una respuesta inflamatoria.
- Obesidad.
- Hipertensión arterial.
- Diabetes mellitus.
- Elevación del colesterol total.
- Descenso del HDL.
- Vida sedentaria. El ejercicio físico ayuda a disminuir la respuesta inflamatoria en la pared de las arterias.



Hablemos de prevención, hablemos de alimentación.

Para el tratamiento del colesterol los pilares más importantes son la alimentación y el ejercicio físico. Esta relación ha sido estudiada y establecida, y cada vez con nuevas evidencias.

Las pautas alimenticias para prevenirla no son más que las recomendaciones propuestas para la población sana, y que lamentablemente están muy lejos del patrón alimentario de la población actual.

Lo primero que hay que hacer es reducir la cantidad de grasas saturadas y aumentar la de las grasas insaturadas.

Es muy importante mantener este equilibrio, ya que si sólo reducimos las saturadas y no aumentamos las insaturadas bajarán los niveles tanto del colesterol bueno (HDL) con el malo (LDL). Es decir, para mantener unos buenos niveles de colesterol bueno (HDL) debemos aumentar las grasas insaturadas.

Grasas saturadas:
(La ingesta de grasas saturadas inhibe la actividad de los receptores hepáticos de los LDL, elevando así los niveles de éstos en sangre).

    - Todas las grasas de origen animal: tocino, mantequilla, carne de vacuno, de cordero, de cerdo, embutidos, salchichas, morcillas, carne picada, huevos ...

     - Derivados lácteos: leche entera, nata, quesos secos, salsas ...

     - Comidas preparadas, conservas, bollería, pastelería, mantequilla, dulces, Snack ...


Grasas insaturadas:

  · Poliinsaturadas:

        - Poliinsaturadas omega-3:

               o Pescado azul: sardina, atún, salmón, bacalao, arenque, anchoas, caballa ...
               o Frutos secos: Nueces
               o Semillas de soja, de lino y sus aceites.

        - Poliinsaturadas omega-6:

               o Nueces, semillas de girasol, germen de trigo, sésamo, soja, maíz y sus aceites ...


· Monoinsaturados: Aceite de oliva, aguacate, nueces, avellanas, almendras, anacardos ...


Se recomienda consumir:

- Legumbres, frutas, verduras y hortalizas frescas, pasta, pan y arroz integral, etc ...
- Leche y productos lácteos descremados.
- Infusiones, bebidas bajas en calorías. Beber como mínimo 1,5 l / día.



En lo que respecta al ejercicio físico, practicar una actividad física regular adecuada a la edad ayuda reducir los niveles del "colesterol malo" y también nos ayuda a mantener en forma el aparato cardiocirculatorio. Muévete y cuídate!